martes, 13 de diciembre de 2011

CRÓNICAS DEL ONCE

Miradas de cristal que reaniman mis recuerdos

colores fugaces de cenizas que se van.

Los bríos que coseché ya han partido,

pero las enseñanzas de un ayer, hoy se quedarán.


Mil maneras de añejar un sentimiento frío,

sólo una, para reflejar la tibieza de su andar.

Un año más, aunque sombrío hoy lo es nítido.

sueños de espera y de lucha pronto llegarán.


Los lares vacíos ya se encuentran,

cadenas de incertidumbre ya no existen,

los manantiales de agua ya no lo son,

y el terremoto a los de Japón un poco los mareó.


Sicilia compromete, Calderón arremete,

Pues el helicóptero a los de gobernación da muerte.

Y los libros ponen silencio a la boca de Peña Nieto;

ya que a Niurka y a Ninel como siempre, siempre se les va el cohete.


Y así como está el desempleo, Jobs se quedó sin empleo,

El cine mexicano con Lavat y Capulina, a México de luto vistieron.


Fuertes conflictos el once ha dejado,

Porque de sangre el medio oriente se ha llenado.

No obstante, el Quetzal observa,

Las injusticias que el nopal cosecha.


Llano es el andar, de la brecha hacia el manglar

dónde los activistas esconden las pruebas que la fauna deja

para así al político atrapar.


Se viene el doce, los mayas auguran,

los pueblos sospechan,

Pero en realidad, la verdad solo es una,

elecciones nos esperarán.


Las águilas esperan a su retorno anidar,

un nuevo triunfo con Pelaez haber si lo lograrán.

Y a Pablo Hermoso de La México

en hombros hay que sacar.


¡Adiós!, dos/once

¡Venga!, dos/doce